A propósito del mes de la Ciberseguridad, hoy en día, proteger nuestras cuentas es casi como asegurarnos de no dejar la puerta de la casa abierta. Entre contraseñas, códigos de seguridad y nuevas tecnologías, puede parecer complicado, pero en realidad no lo es tanto. Vamos a desglosarlo todo, para que lo tengas claro y sin estrés.
Primero, tenemos la autenticación de dos pasos (2FA, por sus siglas en inglés). Esto es cuando, además de tu contraseña, necesitas un segundo código para acceder a tu cuenta. Este código lo recibes en tu teléfono o correo, o bien lo generas mediante una aplicación de seguridad. Piensa en esto como ponerle una segunda cerradura a tu puerta. Si alguien intenta entrar solo con la contraseña, no podrá hacerlo sin ese código extra.
Algunas de las aplicaciones más comunes para generar estos códigos son:
- Google Authenticator
- Microsoft Authenticator
- Authy
- Duo Mobile
Estas apps te permiten generar códigos temporales en tu dispositivo móvil, haciéndolo aún más seguro que recibir el código por SMS, ya que los mensajes de texto pueden ser vulnerables.
Passkeys: Apple y Android se ponen serios
Si eres de los que odian recordar contraseñas, aquí entra una solución muy moderna: las passkeys. Apple y Android han introducido este sistema que usa cosas como tu huella dactilar o el reconocimiento facial para iniciar sesión. Ya no tienes que memorizar nada complicado ni escribir esos códigos largos. Simplemente pones tu dedo o dejas que el teléfono te "mire" y listo, acceso garantizado.
Estas passkeys son más seguras que las contraseñas tradicionales, porque no pueden ser robadas fácilmente. Es mucho más difícil copiar tu huella dactilar que hackear una contraseña mal hecha, ¿no?
Por qué no reutilizar contraseñas
Sí, sabemos que es tentador usar la misma contraseña para todo porque, seamos sinceros, ¿quién quiere recordar veinte contraseñas diferentes? Pero reutilizarlas es un gran error. Imagina que alguien adivina tu contraseña de una cuenta… y ahora tiene acceso a todas las demás. Es como darles la llave de tu casa, carro y oficina de una sola vez.
La clave está en crear contraseñas seguras: largas, con letras (mayúsculas y minúsculas), números y símbolos. Algo como M1Contr@S3gurA!. Evita cosas como 123456, password o usar tu nombre o fecha de nacimiento. Y si te cuesta recordar tantas contraseñas, usa un gestor de contraseñas, esas aplicaciones te ayudan a almacenarlas todas bajo una contraseña maestra.
Por ultimo y no menos importante, hablemos brevemente de algo que es cada vez más común: el phishing. Son esos mensajes o correos que te hacen creer que son de una empresa confiable, como tu banco o una red social, y te piden que hagas clic en un enlace o que envíes un código de seguridad. No caigas en la trampa. Si recibes algo así, lo mejor es que contactes directamente con la empresa desde su página oficial, y nunca compartas códigos o información personal.
Pronto hablaremos más sobre cómo detectar estos intentos de engaño, pero por ahora, ten en mente que cualquier cosa que suene sospechosa o demasiado urgente debería levantar una bandera roja.
Resumen rápido
- Activa la autenticación de dos pasos en todas tus cuentas.
- Si puedes, usa passkeys para mayor seguridad y comodidad.
- No reutilices contraseñas; mejor, crea una contraseña diferente y segura para cada cuenta.
- Y recuerda: cuidado con el phishing, no confíes en mensajes sospechosos.
Con estos simples pasos, estarás protegiendo tus cuentas como un verdadero profesional de la seguridad.